España anunció su compromiso de reducir los contaminantes climáticos de vida corta en 2019.
España ha estado tomando medidas para hacer frente a la salud, el cambio climático y la calidad del aire, que considera retos importantes y conectados. Ha presentado un Marco Estratégico de Clima y Energía, un plan ambicioso para lograr su compromiso bajo el Acuerdo de París, trabajar hacia la neutralidad de carbono y lograr una generación de electricidad 100% renovable para 2050.
El país también ha desarrollado un Programa Nacional de Control de la Contaminación del Aire que tiene como objetivo alcanzar los valores de las Directrices de Calidad del Aire Ambiental de la OMS y reducir aún más la contaminación del aire y sus riesgos asociados para la salud humana y el medio ambiente.