La República Democrática del Congo está tomando medidas ambiciosas para enfrentar los desafíos del cambio climático y la contaminación del aire simultáneamente en vista de sus imperativos de desarrollo. El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible está trabajando con la Iniciativa de Apoyo a la Planificación Nacional (SNAP) para desarrollar y construir un inventario integrado de emisiones de gases de efecto invernadero, SLCPs y contaminantes del aire. Este trabajo está allanando el camino para la elaboración de políticas informadas y estrategias de reducción de emisiones que, en última instancia, dirigirán los beneficios en el país hacia los objetivos de salud y desarrollo.
Situada en África Central, la República Democrática del Congo (RDC) es cada vez más vulnerable a los impactos del cambio climático, desde el aumento de las temperaturas, los cambios en los patrones de lluvia, el aumento de la inseguridad alimentaria, los fenómenos meteorológicos extremos y los daños a la infraestructura. Al mismo tiempo, los niveles de contaminación del aire que superan las pautas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) siguen siendo un riesgo importante para la salud, particularmente en centros urbanos como la capital de la megaciudad de Kinshasa, hogar de más de 11 millones de los 84 millones de personas que viven en el República Democrática del Congo. Estas amenazas incluyen problemas respiratorios, enfermedades crónicas y mortalidad prematura, y son causadas principalmente por sectores contaminantes como la energía doméstica, los desechos, la agricultura y el uso de la tierra.