El monitoreo, modelado y pronóstico de la calidad del aire es un elemento esencial del esfuerzo global para evaluar y desarrollar respuestas políticas apropiadas para reducir el daño inmenso a la salud humana causado por la contaminación del aire.
La contaminación del aire ocupa un lugar destacado en la agenda mundial, como se refleja en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que incluyen tres indicadores, relacionados con el acceso a la energía en los hogares, la calidad del aire en las ciudades y la mortalidad por la contaminación del aire, para los cuales la Organización Mundial de la Salud ( OMS) es la agencia de custodia.
En mayo de 2018, la OMS publicó información que reveló el alarmante costo de la contaminación del aire: 7 millones de muertes causadas por la exposición a la contaminación del aire ambiental y doméstica cada año. Señaló que más del 90% de la población mundial vive en áreas donde la contaminación del aire supera los límites de la OMS.