El enfriamiento es una de las áreas de intervención críticas, tanto durante como después de la pandemia de COVID-19, que puede ayudar a satisfacer las necesidades de emergencia a corto plazo y respaldar la recuperación económica a largo plazo, al mismo tiempo que contribuye al desarrollo sostenible y crea una mayor resiliencia ante futuras crisis. Al incorporar activamente un enfriamiento eficiente y amigable con el clima en todos los sectores en sus paquetes de estímulo, los países pueden aumentar su capacidad para capear las tormentas pandémicas, pero cumplir con el Acuerdo de París, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Enmienda de Kigali.
Este resumen, desarrollado conjuntamente por el CCAC Efficient Cooling Initiative and the Cool Coalition, presenta cómo, en múltiples sectores o sistemas económicos críticos (edificios, electrodomésticos, entornos urbanos, cadenas de frío e I+D), los gobiernos nacionales pueden reorientar las políticas públicas e incluir el enfriamiento en sus paquetes de recuperación.